La concejala del CDL en el Ayuntamiento de Dénia, Mari Martínez, ha denunciado que desde que empezaron las obras de la Plaza del Gobernador en el Castillo de Dénia, ni el trenet turístico ni los vehículos de discapacitados pueden acceder a la parte alta del monumento más emblemático de la ciudad.
Preguntados al respecto los miembros del equipo de gobierno aluden a la posible rotura del pavimento y las manchas por rodaduras que causaría el paso de los vehículos, si bien Martínez responde que "ya han pasado camiones y vehículos de obra por el pavimento, dejando sus rodadas y no se ha roto. Respecto a las manchas, bastaría una limpieza del mismo, encargándose de ello la propia empresa concesionaria del trenet, cosa que hasta ahora no hace nadie".
El coordinador del área de Gestión del CDL, Sergio Benito, apuesta por "la evidente necesidad de de un Plan Rector de Uso y Gestión, que permita compatibilizar la protección y conservación del patrimonio de la ciudad, con los usos culturales y turísticos".
Los nacionalistas denuncian la falta de atención e inversión en el Castillo
Josep Crespo indicó que el Castillo de Dénia no recibe ni la atención ni las inversiones necesarias. Añadió que comprende la situación económica en la que se encuentra el municipio pero que espera que, la concejala Pepa Font, clarifique a qué proyecto va a dedicar el 1% cultural del Ministerio de Cultura. Recordó que el proyecto hay que presentarlo antes de finales de este año y remarcó que los nacionalistas esperan que se plantee pronto para que ese dinero no se pierda como en otras ocasiones. Crespo señaló el hecho de que esté paralizado el Centro de Interpretación, cuyas obras están acabadas, y el retraso en el desarrollo de las obras de la cafetería y el polémico ascensor. Además, informó de que no existen unas buenas condiciones de salubridad e higiene en los baños del que considera el monumento más importante de nuestra ciudad. Por otra parte, y en relación al turismo, el edil nacionalista dijo que falta cuidar la atención que reciben los visitantes del Castillo y denunció la inexistencia de folletos y paneles informativos, en varios idiomas, que guíen al turista dentro de éste.
