EUPV ha difundido esta mañana los protocolos de derivación de pacientes del Hospital de Dénia al Hospital de Atención a Crónicos y Larga Estancias de La Pedrera. El conseller de Sanitat Manuel Llombart remitió a principios de mes la documentación a la diputada de Esquerra Unida Esther López Barceló. La candidata de EU por Alicante en las autonómicas y también portavoz adjunta del grupo parlamentario había solicitado el pasado 28 de enero al presidente d las Cortes una copia íntegra y literal de los protocolos que aplica Marina Salud.
López Barceló a la vista de las dificultades que algunos pacientes del hospital han tenido de cara a ser derivados a la Pedrera solicitó la información para que pudieran defender sus derechos.
Protocolos que aplica el hospital de Dénia
En el documento la Conselleria afirma que los criterios establecidos intentar definir unas políticas específicas de alta para cada programa asistencial, con el objetivo de mejorar la eficiencia de La Pedrera y también marcando como meta una estancia media adecuada para cada tipo de paciente.
De cara a facilitar las altas y fomentar la transparencia entre los centros se definieron los siguientes procedimientos: identificación de los pacientes en situación PUA (pendientes de ubicación una vez recibida el alta), la reasignación del programa asistencial, la autorización de la atención ambulatoria en "Programa de Daño Cerebral Adquirido" y la definición de interlocutores válidos entre los centros.
También se establecieron criterios de derivación-admisión generales a La Pedrera y los de exclusión, así como criterios específicos por cada programa asistencial (daño cerebral adquirido, convalescencia, curas paliativas y larga estancia).
Tipología de pacientes
Respecto a los pacientes que pueden ingresar en la Pedrera la Consellería definió cuatro tipologías. Aquellas personas con un proceso agudo o descompensación de una enfermedad crónica que precisen de curas clínicas o rehabilitadoras dirigidas a recuperar su nivel de autonomía, aquellos que sufren daño cerebral agudo con déficits múltiples y que precisan curas o rehabilitación orientadas a recuperar suficiente nivel de autonomía. También aquellos pacientes con un empeoramiento progresivo de alguna enfermedad previa que precisen atención o control para adaptarse a su nueva situación y en los que no se espera mejoría notable. Y en cuarto los enfermos terminalesque precisen atención y que esta no les pueda ser administrada en su domicilio.
