La falla Campaments celebró, el pasado fin de semana, su primera capea. Lo hizo en Ondara, donde se reunieron falleros y amigos para combatir el sofocante calor del mes de agosto con baños en la piscina, música y alguna que otra cogida, que por suerte no fueron graves.
La jornada incluyó almuerzo y una paella para comer. Al finalizar se rifaron varios regalos entre los asistentes, la mejor manera de poner punto final a una jornada de fiesta y diversión.