Los efectivos del Parque Comarcal de Bomberos de Dénia tuvieron en la noche del lunes una curiosa actuación. Tuvieron que acudir a unos recreativos de la calle Marqués de Campo para atender a un hombre cuya cabeza había quedado atrapada entre el inodoro y la pared.
Fueron los empleados del local quienes dieron aviso al 112, que de inmediato enviaron a una dotación de bomberos al lugar. Los efectivos tuvieron que desinstalar el inodoro para liberar al hombre, que no estaba herido pero, al parecer, había bebido.
Una ambulancia se trasladó a la zona para atender al hombre, pero finalmente no fue necesaria su intervención ni el hombre tuvo que acudir a un centro médico.