Este jueves se han presentado a los medios de comunicación las novedades de la inminente temporada de playas de Dénia. Pepe Doménech, concejal del área, ha enumerado las particularidades de este periodo estival, entre las que ha destacado la instalación, de nuevo, de los seis chiringuitos que habitualmente correspondían al litoral de la ciudad y que el pasado año quedaron reducidos a la mitad. Eso sí, no todo son buenas noticias para los vecinos y el turismo, pues un informe de la conselleria de Medi Ambient obliga a retrasar varias semanas la apertura de estos.
La buena noticia, Dénia volverá a disponer de seis chiringuitos. Según ha confirmado el concejal Pepe Doménech, este año volverán a haber media docena de estos locales en las arenas de las playas de la ciudad. El año pasado solo se pudo contar con el de la Marineta Casiana, el de Bovetes y un último en Punta del Raset. No obstante, este año el Raset volverá a tener dos, y Les Albaranes y Els Molins recuperan los suyos.
El «error» que cierra 2 meses de servicio
La mala noticia, no abrirán hasta julio. Al menos, así será si no rectifica la conselleria de Medi Ambient, como está peleando el Ayuntamiento, un informe en el que ha dictaminado que todas las playas de Dénia son naturales. Esta consideración implica que no se puede instalar negocios de este tipo fuera de la temporada alta que abarca solo julio y agosto. No obstante, varios de estos chiringuitos esperaban arrancar ya, pues así quedaba firmado en la licitación.
Según la Ley Valenciana, ha defendido Doménech, Dénia cuenta con varios kilómetros considerados playas urbanas, como son Marineta Cassiana, Bovetes, L’Almadrava, y tramos de Les Marines y Deveses. Esto permitía que los chiringuitos de Marineta y Bovetes pudieran operar desde el 1 de mayo, como estaba acordado. Pero lo que el edil ha calificado como «un error» de la conselleria de Medi Ambient impide que puedan iniciar el servicio hasta el 1 de julio. En este sentido, la concejalía y el Ayuntamiento están insistiendo para que haya una rectificación.
Todos los chiringuitos volverán a disponer de aseos públicos adaptados, además contarán por primera vez con desfibriladores para casos de urgencia. También con placas solares. Lo que ya no dispondrán todos será de cocina, pudiendo contar con ella solo aquellos que estén en playas urbanas.
