La paz y belleza de la Marineta Cassiana

"Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar. Pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar". Así comenzaba Machado una de sus obras más conocidas y sobre el mar hemos caminado para descubrir uno de los parajes más bellos de la costa dianense, la Marineta Cassiana. La playa que recibe su nombre de las Hermanas Cassianas, antiguas propietarias de la zona, se extiende en un bello paseo peatonal donde con un giro de cabeza a la derecha se puede gozar de un magnífico Montgó y de un mar extenso, símbolo ancestral de la libertad, con la acción inversa.

Construcciones de nuestro siglo lucen pacientes sus cimientos con sus particulares y privilegiadas vistas. Entre ellas una segunda altura llena de vegetación cobija un antiguo cementerio que custodia una lápida y en ella un epitafio en inglés. Las piedras centenarias que sirven de fortaleza, bastante desgastadas, se modernizan con el fluorescente de un barato spray con el que alguien quiso dejar su rubrica o ¿quizá fue un acto de bandalismo?.

La humedad veraniega y el clamor de los chiringuitos desaparece como desaparece la arena para comenzar a mostrarnos los vestigios de unión entre nuestra ciudad y las pitiusas. Las rocas comienzan a adornar una visión en la que cada vez se hace más latente la conjunción mar-montaña, montaña-mar. Y es que en Dénia da igual de que horizonte vengas o la orilla que suponga tu destino. Quieras vegetación terrestre o marina aquí la podrás encontrar viniendo de fuera o ignorándola desde tu casa situada dentro de este paraiso histórico.