Cuando llega el buen tiempo mostramos más piel, ya que vestimos ropa ligera, esto supone para aquellas personas que padecen varices, que se vean en el espejo unas pierdas desfavorecidas. Además sufren el aumento de las temperaturas y comienzan las pesadeces incómodas, picores, inflamaciones y molestias. Por ello, en HLA San Carlos recomienda "empezar la batalla contra las varices en los meses más fríos".
“Las varices con dilataciones de las venas por acumulación de sangre, pueden aparecer en las piernas”, explica el doctor Miguel León Donoso, especialista en angiología y cirugía vascular del Hospital HLA San Carlos. Contra estas viejas conocidas, principalmente de las mujeres y en algunos casos también de los hombres, “se han aplicado todo tipo de tratamientos para aliviar sus síntomas, desde la simple aplicación de vendajes, pasando por las cirugías, hasta métodos más novedosos y menos agresivos como la microespuma y los procedimientos endovasculares”, argumenta el Dr. León Donoso.
Los orígenes de la enfermedad debemos buscarlos en un mal funcionamiento del retorno venoso de nuestro cuerpo, que provoca que la sangre se acumule en un punto determinado, donde nuestras venas se dilatan. “Los desencadenantes de este problema suelen estar en el sedentarismo, por pasar muchas horas de pie o sentados, en el embarazo o por una predisposición genética”, asegura el angiólogo.
La solución
Entre las distintas alternativas terapéuticas que existen para el tratamiento de esta insuficiencia venosa periférica, conviven los métodos quirúrgicos y los que no exigen al paciente pasar por el quirófano. En el hospital del Grupo HLA en Denia, la alternativa quirúrgica que proponen para tratar las varices es “la Safenectomía o fleboextracción, esta técnica aún en plena vigencia, consiste en extirpar la vena dilatada y sus ramificaciones” relata León Donoso y aclara que “la elección de un centro sanitario que ofrezca todas las garantías y un equipo de profesionales especializados y experimentados en esta técnica, reduce al mínimo los efectos adversos del postoperatorio, acortando los plazos de recuperación y agilizando el alta médica”.
En contraposición a la cirugía tradicional, de unos años a esta parte, han proliferado otras “técnicas menos invasivas mediante la utilización de láser o radiofrecuencia, que se basan en la eliminación de la vena varicosa mediante termoablación” describe el facultativo y continúa que “estas modalidades han demostrado tener menos complicaciones y una recuperación mucho más rápida en comparación con la cirugía abierta”, por lo que están cada vez más en boga entre los centros y profesionales que las ofrecen y los pacientes que las demandan.
Pero el método menos agresivo, más efectivo y a disposición de los pacientes de HLA San Carlos “es el Clarivein: en esta técnica se introduce un catéter en la zona afectada de la vena, donde se realiza una ablación mecánica (cauterización con una descarga eléctrica) y otra química, inyectando una microespuma esclerosante” relata el cirujano vascular, que asegura que “este tratamiento se realiza de forma ambulatoria y con ayuda de un ecógrafo. Mediante esta técnica se logra una anulación total de la variz, y tiene como ventaja sobre la radiofrecuencia o el láser, que no requiere tumescencia y puede ser realizada sólo con anestesia local y una mínima sedación, facilitando el alta y la reincorporación a una rutina casi normal a las pocas horas del procedimiento”.
Hay casos en que no es necesario ningún tipo de intervención y el tratamiento puede pasar por la aplicación de microespuma, aunque para el profesional “los efectos adversos de este tratamiento pueden no complacer al paciente que busca solucionar un problema puramente estético”. De ahí, la importancia de buscar la asistencia de un experto angiólogo o cirujano vascular que “además de conocer y aplicar estas técnicas, esté preparado para abordar eficientemente posibles complicaciones. Es el único modo de garantizar la seguridad para el paciente”, sentencia el facultativo.
