La semana en Dénia ha comenzado muy fuerte: el lunes, a las 6 de la mañana, la Generalitat decretaba la preemergencia meteorológica nivel rojo por lluvias y fuertes vientos. Durante horas el agua no cesó y se llegaron a recoger 70 litros por metro cuadrado en la capital de la Marina Alta.
Los lugares más conflictivos volvieron a ser los habituales: en la carretera de Las Marinas varios caminos terminaron anegados, la entrada a la ciudad mostraba a primera hora unas rotondas inundadas y varias playas desaparecieron comidas por el mar.
En la carretera de Dénia a Jávea se desprendió un muro de la calle Canopus, en la colina de San Nicolás, siendo cortada al tráfico y sin lamentar daños personales. También hubo que cortar al tráfico el camí Fondo de la Xara.
La flota pesquera no salió a faenar. En el puerto, un desprendimiento en la lonja antigua, que está siendo rehabilitada, puso en alerta a los trabajadores, si bien no hubo que lamentar ningún daño personal.
Como anécdota, pudimos ver a lo largo de la mañana a algunos valientes que aprovecharon el temporal para practicar windsurf en zonas como la Playa de la Marineta, una de las más afectadas por el temporal.
A las 10:30 la lluvia cesó, pero no así el viento, que castigó a la ciudad durante todo el día y que hoy será protagonista con fuertes rachas durante toda la jornada.