No solo en Dénia hay problemas con la red de alcantarillado local. También en Jesús Pobre llegar a cada casa les está costando más de un quebradero de cabeza. Tanto es así que la EATIM ha renunciado a su gestión, competencia que ha decidido devolver al Ayuntamiento de Dénia.
Durante el pleno de ayer se votó la propuesta defendida por Javier Scotto, alcalde de la EATIM de Jesús Pobre. Las motivaciones que ha llevado a tomar esta decisión a la Junta Veïnal, según apuntó Scotto, son puramente económicas.
Al igual que sucede en Dénia con las afueras de la ciudad, en Jesús Pobre llegar con el alcantarillado a ciertos puntos supone un gran desembolso, requiriendo para la gestión de la problemática 2'5 millones de euros, un presupuesto muy superior al anual con el que cuenta la EATIM.
El Ayuntamiento de Dénia cuenta desde este ejercicio con una Oficina Municipal de Alcantarillado donde se estudia y gestiona la conexión de la red con los puntos a los que aún no ha alcanzado. La intención de Jesús Pobre es poder incluir su gestión en esta oficina, beneficiándose del trabajo que ahí se realiza.
La propuesta fue aprobada por mayoría con la abstención de Gent de Dénia y Compromís.
