Durante el pasado mes de julio se celebró el “II Campus de Atletismo”, organizado por el Club Atletismo Baleària Diànium. La remodelación de la pista del polideportivo obligó a trasladar la actividad al campo Rodat, algo que no fue excusa para que se realizasen las actividades previstas, todo ello gracias a la colaboración de la concejalía de Deportes.
En esta edición fueron 30 los alumnos participantes, en su mayoría formados en la Escuela Municipal de Atletismo que coordina y dirige el propio CA Baleària Diànium. Significar que 8 de los alumnos fueron primerizos, al ser su primer contacto con el deporte del atletismo.
El día a día del Campus fue muy entretenido para los niños y niñas, que realizaron una gran variedad de actividades, entre ellas, carreras con vallas, aprendizaje de la técnica del paso de valla, aprendizaje de la técnica de los diferentes lanzamientos, trabajo de coordinación muy variado, marcha atlética, saltos de altura, pértiga, longitud y triple salto. No faltaron los ejercicios de velocidad, circuitos de resistencia, carreras de relevos. De esta manera, pudieron aprender la técnica básica de todas las especialidades que tiene este deporte y vivieron de cerca la esencia que tiene el atletismo.
Gran reto para los entrenadores
Verdaderamente fue un gran reto para los entrenadores del club, Aina Fornés y Miguel Castillo, que supieron adaptar una forma original para la práctica de las diferentes especialidades del atletismo, al no tener la instalaciones ideal que hubiese sido una pista de atletismo.
Los alumnos recibieron varias visitas, entre ellas las de dos de los monitores del club, Emilio Monfort y César Bas. Ellos aportaron más variedad a las actividades del campus. Pero la más destacada fue la de Pablo Trescolí, actual campeón de España Absoluto de Decatlón. Su estancia fue muy enriquecedora para los alumnos que tuvieron la oportunidad de conversar y escuchar con atención los consejos de uno de los mejores atletas españoles del momento.
Durante todo el campus se cumplieron las medidas de seguridad establecidas por la Conselleria como consecuencia de la crisis del COVID-19, algo que dificultó un mayor acercamiento a los alumnos. En todo momento los participantes y los técnicos sintieron la libertad después de haber pasado unos meses sin poder salir de sus casas.
