El equipo del Garbí Dénia sufrió una de sus derrotas más amplias de esta temporada, al caer en su propio pabellón ante el Marni Valencia por 22 a 26.
Fue un partido extraño, con unos jugadores dianenses ausentes durante todos los minutos. El equipo se encontró con un rival con gente joven, que imprimió un ritmo muy alto al juego. A los hombres que entrena David Salanova, les pesaban muchos las piernas sobre todo en defensa. Nunca pudo contener el juego de los valencianos.
La ausencia de un jugador como Raúl Fluxá se notó en exceso, ya que además de los goles que suele sumar para su equipo, en defensa es uno de los que más carácter imprime al equipo y se le echó en falta.
Todo el partido fue claramente dominado por los valencianos, que al descanso se retiraron con una ventaja de 7 goles, (9-16).
Nada cambió en la segunda mitad, el Garbí Dénia no tuvo poder de reacción, y el Marni se aprovechó de esta circunstancia para seguir con un ritmo muy alto de juego que desarboló una y otra vez a su rival. Al final del partido el 22 a 36 es un fiel reflejo de lo vivido en la pista del polideportivo de Dénia.
El entrenador David Salanova tiene un duro trabajo por delante con su equipo.
