Empezaré contándote cómo una persona decide abrir un Centro Privado de Educación Infantil de Primer Ciclo (de ahora en adelante "Guarderia").
Una persona - el 98% de esas personas son mujeres- acaba sus estudios universitarios de Maestro en Educación Infantil y hace unas prácticas en una guardería, se da cuenta de que le encantan los niños, que disfruta con ellos y que se quiere dedicar a ello. Al acabar las prácticas empieza a buscar con mucha ilusión y entusiasmo un trabajo en una guardería. Consigue un trabajo y con el tiempo (seis meses, un año... o más) pierde el trabajo. Sigue buscando trabajo y se da cuenta de que no es tan fácil porque no hay tantas guarderías como para tantas personas buscando trabajo de lo mismo.
Después de unos meses, habla con su familia (abuelos, padres, novio, marido, suegros) y decide abrir una guardería porque entiende que es su VOCACIÓN. Consigue que su familia le apoye, le ayude, le deje dinero, incluso sus familiares se prestan a avalarla para firmar un préstamo para que consiga su sueño.
Cuando se da cuenta está ante una inversión enorme (se calcula que la media es de entre 100.000€ y 200.000€). La Consellería de Educación es tremendamente exigente con las instalaciones y las titulaciones del personal del centro, pero aún así decide seguir.
Después de tanto trabajo y tanta exigencia, abre y se da cuenta de que la competencia es aún más dura y exigente de lo que creía, pero decide trabajar y luchar por su sueño. Trabaja innumerables horas para poder tener una guardería de calidad y dar un buen servicio a los niños.
No vamos a hablar sobre los bonos que paga la Consellería... porque a parte de ser insuficientes para sus exigencias, llegan siempre tarde.
Total, que durante años, esa persona se ve ofreciendo un servicio que la Generalitat no ha podido dar a cambio de mucho trabajo y poca recompensa económica. Muy Poca.
Esa persona se da cuenta de que la recompensa económica es muy poca pero que tampoco es tan importante. Lo importante es llegar a casa y pensar "hoy Bruno me ha dado un abrazo al llegar", "Pau está empezando a hablar", "Qué gracioso está Hugo, me rio mucho con él"... A eso se le llama cariño, amor... VOCACIÓN POR LOS NIÑOS.
Aquí viene lo importante:
Durante años, la guarderías han sido las que han ofrecido un servicio para educar a vuestros hijos y además han ofrecido otro servicio muy importante LA CONCILIACIÓN LABORAL DE LA MUJER después de dar a luz.
Este servicio lo han hecho de forma extraordinariamente vocacional y con mucho cariño y amor... y a cambio de muy poco.
Y lo más importante, el gobierno de la Comunidad Valenciana no ha sido capaz de ofrecer este servicio de forma gratuita. Lo único que ha conseguido ha sido exigir mucho y pagar poco y mal.
Ahora es cuando la mujer que abrió la guardería se pregunta: ¿Y yo qué he hecho mal? ¿Por qué lo que ha valido durante mucho tiempo ahora ya no vale? ¿Por qué la Generalitat me ha exigido hacer reformas para acondicionar mi centro? ¿Por qué tengo yo que sufrir tanto cambio de gobierno?
¿Por qué la Generalitat decide gastarse 84 millones de euros en esto, si mis aulas están hechas y disponibles?
Y lo más importante, ¿por qué no cuentan conmigo para este proyecto tan bonito si yo he cumplido con todas sus exigencias?
Estoy de acuerdo de que el interés común está por encima del interés particular pero... ¿7000 puestos de trabajo no son interés común?
El 98% de esos puestos de trabajo son mujeres y gran parte de ellas de más de 45 años.
¿Despedir a gente que sabes de antemano que va a tener difícil volver a encontrar trabajo es de interés común?
¿84 millones de inversión pública no es interés común?
Me parece que el Gobierno de la Generalitat está siendo tremendamente injusto con todas las guarderías. Se relaciona a las guarderías con "el sector privado", como si fuese algo negativo cuando casi todas las guarderías son micro empresas. Una guardería no es una negocio tal y como lo conocemos, es 100% vocacional y se mueve con trabajo, cariño y amor.
El Conseller de Educació está siendo tremendamente CRUEL E INJUSTO al tratar así a este sector y espero que se dé cuenta.
Me gustaría dar todo mi apoyo y un fuerte abrazo a todas las directoras de los centros de Dénia y de toda la Comunidad Valenciana. Me consta que están todas ellas muy afectas con la noticia... muchas de ellas ya hacen números para ver si su negocio será viable o no.
Esperemos que el Sr. Conseller recapacite...
Manuel Català
Escoleta Infantil El Castellet
