Sobre las 18:30 de la tarde del lunes, los viandantes que paseaban por la Marina de Dénia han presenciado esta insólita imagen: la policía y voluntarios de APAD atendiendo a un caballo atado bajo una farola del parking del lugar.
El equino, un potro de apenas edad, por lo visto estaba siendo paseado por el dueño, que se encontraba en el lugar con señales de haber abusado del alcohol, según los testigos. El potro tampoco tenía buena imagen, por lo que unos viandantes han avisado a la policía tras presenciarlos en esa vía tan poco común para un caballo.
Según el hombre, se encontraba esperando a un compañero que tenía un campo con más caballos para llevárselo. No obstante, la policía se ha personado en el lugar, los cuales han decidido avisar a la protectora APAD para que se hicieran cargo del animal tras comprobar que no cumplía con las vacunas exigidas.
Los nervios y el miedo del potro eran visibles, según los testigos, lo que ha dificultado la labor de la protectora a la hora de subirlo al vehículo, requiriendo finalmente un transporte especializado para caballos.
