La eliminatoria se ha puesto cuesta arriba para el Paidos-F. Fernández tras caer derrotado en casa ante el Ribeco Castalla por 1 a 5.
En esta ocasión el fantástico ambiente que registro una repleta grada, en el pabellón dianense pasó factura al combinado que dirige Raúl Gil. Los chicos se contagiaron de ese gran ambiente y no supieron gestionar su estado anímico. Se les vio con mucha ansiedad y nervios no habituales en los anteriores partidos.
En el inicio del choque el Ribeco Castalla mucho más centrado que los dianenses, ejerció una gran presión en la salida de balón de los locales. Esa presión provocó que a los chicos del Paidos les durase muy poco la posesión de la pelota. En el conjunto visitante dos jugadores marcaron las diferencias, los gemelos, Vicent y Jordi Valdes, llevaron el peso del juego de su equipo.
El primer gol llegó nada más comenzar el choque, al aprovechar el visitante, Juan José, un regalo de la zaga local. Este tanto todavía puso más nerviosos a los rojillos que no supieron leer la defensa rival. El equipo de Castalla cada vez que robó el balón se fue de forma muy vertical hacía la portería local. El segundo gol llegó en el minuto 7, obra de Vicent Valdes, que aprovechó un error de Nico para batir la portería local.
En pleno desconcierto de los chicos de Raúl Gil, llegó el tercer gol, en esta ocasión obra de Jordi Valdes. Este gol supuso un duró golpe moral para el público y los jugadores dianenses. Con el 0 a 3 se llegó al descanso.
Mejor el Paidos en la segunda mitad
En la segunda mitad los colegiales se dejaron los nervios en el vestuario, se les pudo ver más sueltos sobre la cancha de juego. El balón les duró mucho más en su poder ante un Ribeco Castalla que se echó un poco más atrás, dejando el control del juego a los dianenses.
Con el paso de lo minutos, los colegiales fueron llegando con cierto peligro sobre la portería visitante. Su juego fue más combinativo y con movimientos rápidos de pelota consiguieron encontrar huecos en la defensa rival.
Cuando parecía que los de Raúl Gil iban a acortar las diferencias, llegó una rápida contra y fueron los de Castalla los que marcaron el 0 a 4 por mediación de Vicent Valdes. La respuesta local fue buena ya que rápidamente consiguieron el tanto del honor, obra de Luis, tras una gran jugada personal de Ferrando. A falta de tres minutos para el final, de nuevo, fue el Ribeco Castalla quien aumentó su ventaja con el gol de Juan José. Al final del tiempo reglamentario se llegó con el marcador de 1 a 5.
Una eliminatoria que salvó milagro ya está resulta para el conjunto de Castalla que demostró en Dénia ser el equipo más poderoso de la categoría en la provincia de Alicante. Es el máximo candidato a conseguir el ascenso a la División de Honor de juveniles.
Destacar la gran respuesta del público que lleno a rebosar la grada del pabellón municipal de Dénia, que una vez más se quedó pequeño ante la gran afluencia de aficionados que acudieron a presenciar este choque.
