«Que no pare la maquinaria», ese es el compromiso que ha adquirdo la Directora Territorial de Educación, Tudi Torró, en lo que respecta al proyecto del nuevo colegio de La Xara. Estos días, el arquitecto de la EATIM trabaja en el proyecto del nuevo edificio que albergará las instalaciones del centro y de las que se hará cargo la Consellería de Educación, y desde ahora y hasta que el centro sea una realidad, esperan que no se pierda más tiempo del necesario.
Estas declaraciones las realizó Tudi Torró en la que fue la primera visita de un representante de la Consellería a los barracones de La Xara desde hace ocho años, donde mantuvo una reunión tanto con la alcaldesa de la EATIM, Maite Pérez Conejero, como con el equipo directivo del colegio.
Torró afirmó que la partida económica, que asciende a casi dos millones de euros, estará incluida en los presupuestos de 2016, año en el que está previsto el inicio de las obras. Si no aparecen contratiempos durante el proceso, en un plazo de 20 días se presentará el nuevo proyecto en la Consellería, que tendrá que ser revisado y modificado en caso de que fuera necesario.
La licitación de las obras se realizaría en el primer semestre de 2016 y antes de que acabara el año los trabajos de construcción estarían en marcha. El plazo previsto de ejecución de las obras es de unos 12 meses, y una vez estén acabadas hay que pasar una serie de inspecciones y trabajos de limpieza, por lo que desde La Xara confían en que antes de que acabe el año 2017, sin necesidad de cuadrar con el inicio del curso, los alumnos podrán estrenar las nuevas instalaciones.
Cuando conoció la intención de Consellería de crear un nuevo colegio desde cero, la alcaldesa de La Xara solicitó un compromiso por escrito que está redactando en estos momentos la Jefe de Servicios de Insfraestructuras, Mariví Daríes. Más allá de un compromiso, Daríes está redactando un informe en el que se plasman las condiciones actuales de los alumnos y el estado de las instalaciones, así como el tiempo que ha pasado desde que los estudiantes comenzaron a ocupar las aulas prefabricadas.
Una vez esté redactado ese compromiso, Dénia deberá aprobar en un pleno la renuncia al dinero del plan Confianza que se iba a destinar a la ampliación del centro para que no exista ningún tipo de bloqueo a posteriori.
El nuevo proyecto incorporará tanto un gimnasio como un comedor que cumplan con la ley en un centro de infantil y primaria destinado a 250 alumnos. De las instalaciones actuales se aprovecharán el vallado y las pistas deportivas.