Durante los días 7, 8 y 9 de julio, la Eatim de Jesús Pobre ha impartido un curso de autodefensa feminista contra la violencia machista, y que ha contado con la especialista en la materia Maitena Monroy, desplazada desde Euskadi.
El curso ha consistido en un taller de autodefensa feminista en el que han participado 14 jóvenes entre 14 y 20 años, para identificar todas las formas de violencia machista y desaprender los roles de género.
El curso ha tenido un formato dinámico, en el propio Ayuntamiento de Jesús Pobre, en el que se han intercalado contenidos teóricos como la construcción social del género y los estereotipos sexistas, como el amor romántico, el terror sexual, el maltrato psicológico o el ciberacoso.
En el apartado práctico, favorecer el empoderamiento de las adolescentes y jóvenes, así como los recursos para saber actuar ante las diferentes expresiones de violencia machista.
Con este taller se cierra la programación iniciada el 28 de junio con el curso de “Cómo hablar de sexualidad y diversidad con tus hijos e hijas”, dirigido a padres y madres e impartido por la sexóloga Carmen Sánchez Ruano, que dentro de la programación en materia de igualdad y erradicación de la violencia de genero están subvencionados por la Diputación de Alicante.
En la foto solo se ven chicas ¿Por que no han incluido a chicos en los talleres? Este es un tema que es para todos no sólo para chicas. Se educa en conjunto no separando por género.
Como ha podido observar en el artículo se tratado de «Autodefensa feminista contra la violencia machista», por lo tanto los chicos a cuales también podría ser dirigido el curso, y se podrían beneficiar de él para comprender mejor el tema de violencia de género no se considerado oportuno.
Porque la violencia de género la ejercen exclusivamente los de género masculino, y la sufren solo las de género femenino según actuales criterios, verdad?
Y si, efectivamente separándonos por géneros y adoctrinando de cierta manera a tan temprana edad, nos costará muchísimo alcanzar una igualdad efectiva.
Muchos chicos y chicas también pueden someter a otros mediante prácticas violentas bien físicas o psicológicas. Muchos de ellos creen que son comportamientos «normales» y no se dan cuenta de que no lo son. Que son comportamientos abusivos y en su mayoría demuestran su incapacidad para gestionar sus frustraciones personales. Mejor educarles en el reconocimiento y gestión de sus emociones que no en un supuesto curso de defensa personal. No sólo se tiene que educar a las supuestas víctimas si no también a los supuestos agresores. Además si esa violencia se ejerce dentro de una pareja de lesbianas o dentro de un grupo de amigas hacia otra chica o dentro de un colegio, bullying, siendo éstas situaciones más habituales de lo que creemos¿ donde queda ese planteamiento fraccionado de la violencia de género? Y permitame que le diga que una chica maltratando a otra puede ejercer y escudarse en los comportamientos más machistas que podamos llegar a creer. Las chicas también insultan llamando «Puta» y cosas peores a otras y lo hacen por diversión o envidia.