Este martes interceptaron en Dénia a un submarinista en la reserva natural del Cap de Sant Antoni realizando pesca furtiva. Un bañista avisaba al puesto de socorrismo de la playa del Trampolí y éste, a su vez, a los guardacostas, advirtiendo que una persona había entrado en el agua con un fusil de pesca submarina.
Una vez personados en el lugar, se intercepta al pescador submarino, que salió del agua con un mero, un sargo imperial, dos sargos y el equipo empleado para su captura. La persona alegó que desconocía que estaba en una Reserva de Interés Pesquero.
El servicio de Guardacostas Dénia procedió al levantamiento de la correspondiente acta y decomiso del equipo de pesca y las capturas. El expediente sancionador será tramitado por la Conselleria de Transición Ecológica. El personal de Guardacostas Dénia entregó las capturas al comedor social de la asociación “Extiende tu Mano” de Dénia.
La pesca furtiva desciende en la zona
Desde el servicio de Guardacostas se ha querido destacar que, a pesar de incidentes como el acaecido ayer, la pesca furtiva ha experimentado una disminución con respecto a otros años y es en parte gracias a la colaboración e implicación de vecinos y turistas, «que conocen, aman y se implican en la preservación de este espacio marino repleto cada vez más de especies cuya proliferación es señal inequívoca del efecto que hace la reserva».
Asimismo, señalan que precisamente a finales de agosto, cuando disminuye la presión turística, aumenta la posibilidad de encontrar intentos de pesca furtiva, por lo que los Guardacostas aumentan el control en horario nocturno.
Un pescador despistado o posiblemente de otra zona y a tenido la mala fortuna de meterse en una zona de reserva solo para deportivos los profesionales pueden pescar (no se entiende que sea reserva) con boya de señalización para ser visto y con menos de 5 kilos de pesca y montáis está mierda de artículo y un operativo de guardacostas ???
Esta lleno de carteles avisando que es una reserva marina y que no se puede practicar la pesca submarina, ni con aparejos, ni con caña.
Si a todos los asociales que vienen a saltarse la normativa a nuestra costas porque se ven por encima de ellas o distintos a los que las cumplimos no se les persiguiera, estaríamos incumpliendo nuestras propias leyes.
Hay gente que le gustaría que España fuera como antes, pero la mayoría ya no queremos parecernos a países subdesarrollados o acabar como el Mar Menor