El CFS Mar Dénia no levanta cabeza y sigue con su racha de malos resultados, ya que cayó por 3 a 5 en el choque vivido en el pabellón Joan Fuster que registró un lleno absoluto, pero que tristemente no pudo ver una victoria de su equipo.
Desde el pitido inicial, ambos conjuntos intentaron imponer su sistema de juego y no tardaron en llegar las primeras ocasiones. El cuadro dianense, con mayor control del balón, disfrutaba de mejores ocasiones y parecía tener controlado el mismo, aunque el conjunto catalán a la contra ponía una y otra vez a prueba a Sergi, quien volvía a ser el encargado de defender la portería local.
En el minuto 6 llegaba el 1-0 tras una buena jugada colectiva que finalizaba Ferrán con una bonita vaselina tras la salida del portero. El Mar Dénia disfrutaba de sus mejores minutos y parecía tener el control del partido pero una vez más con falta de gol. En los minutos finales del primer periodo, el cansancio se hacía notar en las piernas de los locales, hecho éste que aprovechaba el cuadro de Ripollet que se volcaba en busca del empate y lo conseguía en el minuto 19, marcando el 1-1 con el que se llegaba al descanso del partido.
La segunda parte fue diferente y el conjunto visitante, con un punto más de velocidad, acechaba continuamente la portería dianense, aunque fue Curro quien en el minuto 24 volvía a adelantar al Mar Dénia con un bonito gol por alto salvando la salida del portero. Pero un minuto después llegaba el 2-2 tras una rápida contra.
El partido entraba en una fase donde los ataques eran continuos y cualquier cosa podía suceder. En el minuto 27, Alex Pla anotaba el 3-2, pero nuevamente un minuto después el Ripollet marcaba el 3-3. El público, que una vez más llenaba el pabellón, animaba a sus jugadores.
A falta de 4 minutos para el final, la pareja arbitral expulsaba por doble amarilla a Miguel Marín, con lo que dejaba en inferioridad al conjunto dianense durante dos minutos. El Mar Dénia, con garra y esfuerzo consiguió mantener imbatida su portería y fue entonces cuando el técnico local, Jordi Durán, decidió arriesgar en busca del partido y puso en pista portero jugador. Un portero jugador que en esta ocasión no funcionó y en la siguiente jugada llegaba el 3-4, y a falta de 20 segundos el 3-5 definitivo con el que se llegaba al final del partido.
