El CD. Dénia cayó por 0 a 2 frente al CD. Benidorm, en el segundo partido de pretemporada. En esta ocasión, los dianenses jugaron ante sus aficionados. El resultado es lo de menos, lo que quedó es la sensación del mucho trabajo que tiene por delante el entrenador, Jesús Moratal.
Los dianenses mostraron una gran falta de acoplamiento en su equipo. El bloque como tal no existió, más bien se vio a un equipo donde cada uno por su lado intento jugar al fútbol. Faltó sobre el campo, un juego más pausado, y con las ideas más claras. Esto demostró que es un equipo totalmente nuevo al que le falta más rodaje.
El Benidorm, se mostró como un equipo más homogéneo. Bien colocado sobre el rectángulo de juego y con un sistema claramente definido. En la primera parte, sorprendió a la contra en un par de ocasiones a la zaga local. En una de ellas marcó el primer tanto. Fue una falta de entendimiento de los dos centrales dianenses y Puncho muy atento sorprendió a Maxi en su salida.
Ese gol en contra supuso para el Dénia, que apareciesen los nervios. No encontró el futbolista que pusiese un poco de tranquilidad sobre el campo. Apenas llegadas al área del Benidorm por parte de los locales que solo crearon peligro en lanzamientos desde la esquina.
Poco cambio el juego en la segunda mitad, los cambios de unos y de otros acabaron por romper el ritmo de juego. El equipo que entrena Antonio Villaescusa consiguió un segundo gol que sirvió para sentenciar el choque.
A este Dénia le queda mucho margen de mejora, aunque en su descargo hay que indicar que en teoría jugadores llamados a ser titulares ayer no jugaron por estar con molestias: Javi García, Gervasio, Pepe Gómez y Joel se quedaron sentados en la grada, al no estar al cien por cien físicamente.
