Las obras que se están llevando a cabo especialmente en el centro de Dénia fueron las protagonistas del pleno celebrado en el Ayuntamiento este miércoles por la tarde. Además de las preguntas de los concejales de la oposición sobre el tema, la sala se llenó de comerciantes y vecinos, especialmente de la calle La Mar, que exigieron soluciones ante a problemática que los trabajos pueden generar de cara a verano.
En primer lugar fueron las concejalas del Partido Popular las que presentaron una moción para que las obras se paralizaran en los meses de julio y agosto. La moción, que se había presentado por urgencia, no pasó el trámite y ni si quiera se debatió. La concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, explicó que si se paralizan, estarían en juego inversiones millonarias, puesto que todas las obras tienen que estar finalizadas antes de junio de 2019.
La concejala de GDCU, Pepa Font, abogó por negociar con la Conselleria tanto la paralización como la ampliación de los plazos de ejecución, afirmando que pueden encontrar comprensión en el ente autonómico y evitar el colapso en el centro de Dénia durante el verano.
Tras finalizar el pleno, en el turno de palabra del público, muchas fueron las preguntas que se formularon, por diferentes personas, acerca de las obras y el cronograma de trabajo. Uno de los vecinos preguntó directamente a Ripoll si van a negociar con Conselleria esos parones, a los que la concejala contestó que no van a hacerlo.
El malestar de los vecinos se palpaba en el ambiente, en un pleno algo tenso con asuntos delicados sobre la mesa que no dejó satisfechos a los afectados ni a la oposición.
