Echar la vista atrás a veces no es sencillo. No siempre basta con hacer memoria, pues conforme pasa el tiempo todo puede caer en el olvido. Es por ese motivo que el simple hecho de guardar y compartir un trozo de historia puede cambiar la concepción social de lugar.
Dénia es un pueblo con un riquísimo pasado, subestimado, en ocasiones, por sus propios vecinos. Pero, por suerte, el interés de algunos de ellos por conservar testimonios nos hace entender un poco mejor cómo éramos y cómo hemos llegado hasta aquí.
La imágenes que acompañan estas líneas son solo un ejemplo. Muestran las enormes diferencias de la Dénia de 1918 y la de 2021. Un paisaje, el del puerto de Dénia desde el Castillo, con una diferencia de 103 años. Un siglo que ha provocado grandes y visibles cambios no solo en las instalaciones portuarias, sino en las calles y edificios de la ciudad.
Esta fotografía es solo una de las más de 2.000 que la familia Cardona Far ha donado al Archivo Municipal, compartiendo espacio con otras colecciones privadas que este depósito resguarda para que pueda ser tan bien conservado y documentado como sea posible, y disponerlo para que pueda ser consultado en cualquier momento.
