Los recientes desalojos de los vecinos de los edificios Suertes del Mar y grupo Antonio Català han acelerado algo en lo que el Ayuntamiento de Dénia viene trabajando desde hace unos meses: la implantación de la inspección técnica de edificios en el municipio.
La concejala de Territorio, Maria Josep Ripoll, ha explicado que, como paso previo, se ha elaborado un registro de los edificios con más de 50 años de antigüedad, cuyos propietarios, por ley, están obligados a pasar este tipo de inspección.
Desde su departamento están trabajando con profesionales del sector para la puesta en marcha de esta inspección, que forma parte de una estrategia en materia de rehabilitación y regeneración urbana en la que la concejalía lleva tiempo trabajando.
En abril de este mismo año el Ajuntament de Dénia firmó un convenio con la Conselleria Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio para establecer vías de colaboración en el fomento de la rehabilitación edificatoria, la regeneración y la renovación urbana. En el mes de junio, la concejala ya informó al Consell de Urbanisme sobre esta estrategia, que tiene previsto presentar próximamente en una jornada.
Ripoll ha insistido en que el mantenimiento de los edificios es responsabilidad de los propietarios que el ayuntamiento actúa cuándo se detectan deficiencias en balcones, cornisas o cualquier otro elemento que pueda afectar a la seguridad en la vía pública, "pero no tiene ni la obligación ni la capacidad para realizar el mantenimiento de las fincas".
