Las palmeras tienen un sistema de regulación por el cual generan nuevas hojas en la parte alta de su copa a medida que las hojas viejas se van secando en la zona más baja de la copa.
En nuestra zona, es importante podar las palmeras para conseguir que se mantengan sanas y limpias, retirando aquellas hojas con aspecto marrón o enfermas atacadas por hongos, así evitaremos que se propaguen las esporas a las hojas sanas.
Respecto a los racimos de frutos suelen ser decorativos, pero también consumen energía de la palmera, además de atraer roedores que se alimentan de ellos.
El momento óptimo de poda será durante el periodo vegetativo, en primavera, y evitar siempre temperaturas por encima de los 20ºC que puedan favorecer el ataque de picudo rojo.
El picudo necesita de tres a cuatro meses para completar su ciclo de crecimiento y pasar de huevo a adulto, por lo tanto al menos tres generaciones anuales. Si se tiene en cuenta que la hembra puede poner entre 300 y 400 huevos, la capacidad reproductiva y por tanto de colonización de este insecto es enorme.
Los tratamientos preventivos son los que ofrecen mayor efectividad. La aplicación constante de productos fitosanitarios por aspersión o rociado.
El equipo de profesionales del mantenimiento R.M.M. S.L., realiza las podas y los tratamientos con toda garantía y seguridad. Retiraremos los restos de poda hasta la planta de compostaje, sin que tengas que preocuparte de nada.
Infórmate sin compromiso en R.M.M. Raúl Míguez Martínez, Partida Madrigueres Sud 16, Local A.