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Así ha crecido Dénia, hacia arriba, en las últimas décadas

27 de enero de 2024 - 10:00

Al paisaje de Dénia han regresado en los últimos años las grúas que durante décadas fueron un elemento habitual del skyline de la ciudad. Nuevos proyectos urbanísticos privados se llevan a cabo en los alrededores del municipio para albergar la creciente población dianense. Esto provoca que nuevamente se agrande una Dénia que se mantiene reacia a crecer hacia arriba, aunque no ha sido siempre así.

Dénia no es una ciudad precisamente alta pese a su numerosa población. Mientras que localidades más meridionales como Calp, Altea o Benidorm han apostado por no poner límites al techo, la capital de la Marina Alta ha intentado evitar perder su personalidad de humilde estatura para conservar esa imagen de puerto abierto y de población a pies de castillo. Ahora bien, crecer ha crecido, y los cambios del último siglo son más que notables.

Los primeros edificios «altos» de Dénia

Para dar con el primer edificio de más de cinco alturas nos tenemos que remontar a 1940. El edificio no es otro que el número 10 de la calle Diana, prácticamente en el cruce con la calle Magallanes. Este bloque de viviendas ahora pasa desapercibido, pues se han construido cerca gran cantidad de edificios de mayor altura, pero en su día pudo presumir de ser la construcción de mayor envergadura de Dénia. ¿Hasta cuándo?

En 1945 apareció muy cerca otro edificio de cinco alturas aunque un poco más alto. Se trata del 10 de Ramón y Cajal, confirmando la tendencia del corazón de Dénia, decidido éste a crecer hacia arriba. No obstante, el siguiente gran bloque apareció lejos del centro, en el número 2 de Vicens Collado, el cual fue el primero que llegó a las seis alturas.

Los monstruos de diez alturas

En 1960 el skyline de Dénia sufrió el mayor cambio con la aparición de varios monstruos de cambiarían para siempre el horizonte de la ciudad y doblarían la altura alcanzada hasta entonces. Por un lado aparecieron dos edificios prácticamente gemelos frente al puerto, el 21 y 22 de la explanada Cervantes, uno de ellos de nueve alturas y el otro de diez. Éstos alteraron por completo la fachada marítima, la cual conservaba hasta entonces los aires de población marinera (y que a día de hoy perdura gracias a la zona del barrio Baix la Mar). En lugar de eso, parecía que la ciudad quería seguir los pasos de otras poblaciones turísticas y convertirse en un gigante de cemento visible desde el mar. Por ello estos dos edificios fueron imitados por otros tantos vecinos de la explanada que incluso los superaron en altura, como el gigante que apareció en el 74 para hacer esquina con Marqués de Campo.

Aquel 1960 también fue el año que la principal arteria de la ciudad, Marqués de Campo, creció. El número 42 se levantó en el centro de la calle con unas imponentes diez alturas que lo colocan aún a día de hoy como uno de los edificios más altos de la ciudad, aunque empatado con demasiados.

Las 13 alturas fueron alcanzadas apenas dos años después, confirmando la gran velocidad que estaba alcanzando este «estirón» de Dénia. Nuevamente el gigante elegía Marqués de Campo, pero también afectó al paisaje portuario. Se trata del número 66 de la principal calle de Dénia, un edificio que aún a día de hoy impone por el contraste que hace a su nuevo y bajito vecino que un día albergó el bar Mediterráneo.

En el 62 también la calle Diana, con su número 27, dio un golpe en la mesa, aunque se quedaría el edificio en nueve plantas.

La capital comarcal entró en la década de los 70 con ya toda la explanada Cervantes casi idéntica a la actual. La muralla de edificios de unas diez alturas se impuso y la ciudad parecía decidida a perder su estética de pueblo pesquero para convertirse en un moderno destino turístico.

Les Rotes y Les Marines se suman al «estirón»

También destaca la aparición de un gran bloque de diez alturas en 1965 en Les Rotes. El litoral sur de Dénia tampoco parecía querer librarse de esta tendencia, apareciendo ese año ese gigantesco edificio de la carretera de Les Rotes, que hace prácticamente esquina con camí de la Racona.

Una década después, en 1978, le imitó en altura su vecina urbanización Las Viñas, pero por suerte la moda se zanjó pronto en el lugar y volvió a dedicarse a construcciones más «humildes».

Les Marines no sé quedó muy atrás, pues permitió en 1968 que surgiera un diez alturas conocido como urbanización La Naranja, quedando este conjunto de edificios como los más altos del litoral norte.

Entre 1970 y 1980 los edificios de menos de cinco alturas prácticamente se dejaron de construir. Era la época de lo alto, y a lo largo de Marqués de Campo fueron apareciendo grandes bloques. Si bien la zona portuaria frenó su crecimiento (hacia arriba, siempre), calle Diana y paseo Saladar parecían querer imitar a las vías más altas.

Se acabó construir hacia arriba

Desde 1980 se frenaron las aspiraciones a alcanzar el cielo. Se construyó mucho, y alto, pero casi nada alcanzó las diez alturas en el casco urbano.

Destaca una construcción de 1981 que se ha quedado como una de las más altas de Dénia porque, además de su número de plantas, se construyó en un terreno elevado y bien visible ya que nada a su alrededor tiene más de tres plantas. Se trata del monstruo de 13 alturas de la calle Deimos. El edificio más visible desde la Marineta Cassiana y que altera por completo el paisaje de chalets unifamiliares bajos de la zona.

12 Comentarios
  1. Enrique dice:

    Un premio para el del titular. ¿Crecer para abajo se puede? Poco nivel demuestra es redundancia.

  2. Elle dice:

    Mal empieza el artículo…
    “Nuevos proyectos urbanísticos privados se llevan a cabo en los alrededores del municipio para albergar la creciente población dianense”
    Ojalá fuera así y no pensado solo para es turismo, “sostenible”, solo para especular, solo para alquilar legal o ilegalmente, o para explotación de algunas agencias que poco capital dejan en Denia.
    De todos es conocido la escasa facilidad y nulos apoyos del Ayuntamiento que la pobre población dianense tiene para conseguir una vivienda digna más allá de las alturas de los edificios.

  3. Rosa Serra dice:

    Jo sóc del any 1952, i de menuda la finca del carrer Diana cantó amb Magallanes no estava. Van començar cuán jo tindria entre 8 o 10 anys
    Tots els xiquets del carrer, cuán els obrers no estaven, jugavem per les escales a mig construir ( quin perill!!!)

  4. SUSAN LUDTKE dice:

    That block on Calle Demios, Marineta is an eyesore to the neighborhood and Denia, it shouldn’t have been built in the first place and would be better off demolished

  5. Luis Arens dice:

    El edificio de Calle demios , marineta , es de 1972 y no de 1982 !


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