La Delegación del Gobierno ha decretado que los comercios deberán adelantar su cierre a las 19:00. Esta ha sido la resolución de modificación de horarios de apertura que estaban establecidos tras la declaración del estado de alarma ante la crisis sanitaria del COVID-19.
Además, obligan al cierre los domingos y festivos a todos aquellos espacios de venta con una superficie inferior a 300 metros cuadrados, exceptuando panaderías y pastelerías, quioscos, farmacias, gasolineras y tiendas de conveniencia.
Estas medidas se mantendrán de forma indefinida mientras dure el estado de alarma.