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Grimalt: «Algo tendrá que cambiar en las leyes para evitar que estas cosas continúen ocurriendo»

22 de octubre de 2019 - 14:13

A primera hora de esta tarde, un centenar de personas, entre los que se encontraban los representantes del Ayuntamiento y de todos los grupos municipales, han realizado un minuto de silencio ante el consistorio como rechazo al asesinato machista de esta madrugada y en memoria de la víctima.

Ante la presencia de un gran despliegue de prensa regional y nacional, el Ayuntamiento ha condenado firmemente este hecho. El alcalde de Dénia, Vicent Grimalt, se ha mostrado muy apenado por la situación, la cual ha condenado rotundamente. "Condenar algo que evidentemente solo podemos que condenar, lamentar y llorar, que cada vez continuemos día a día viendo y sufriendo que las mujeres las continúan asesinando sin ningún paliativo. No podemos decir otra cosa, como político, como ciudadano, como vecino de Dénia, lamentar estos hechos, tanto de aquí como de cualquier otra ciudad de España. Hoy nos ha tocado a Dénia y ojalá dejemos de una vez de guardar estos minutos de silencio que día a día tenemos, por desgracia, que hacer", ha declarado Grimalt.

La víctima "había recuperado su vida" por lo que era "imposible de prever"

Ante la cuestión del seguimiento del asesino que ya había quebrantado anteriormente la orden de alejamiento de 300 metros de la víctima, el alcalde ha asegurado que de la forma en la que éste ha actuado y con las leyes actuales era muy difícil de evitar. "Creo que no tenía un riesgo extremo. Tenía un riesgo medio, seguía los controles que marca la ley, que marca la policía. Pero de la forma que lo ha hecho el criminal es muy complicado de evitar. Algo tendrá que cambiar en las leyes para evitar que estas cosas continúen ocurriendo", ha afirmado Grimalt.

También ha comparecido Javier Scotto, concejal de Protección Ciudadana, el cual ha explicado que desde febrero de 2019, que es cuando se produce una sentencia condenatoria por dos delitos de violencia de género y dos de violencia doméstica hacia la hija, la cual se encontraba en el lugar del crimen cuando ha ocurrido todo, se estaba haciendo un seguimiento por Servicios Sociales, el Centre Dona y el grupo Artemis de la Policía Local, además de poseer la víctima un sistema de aviso o alarma. El asesino tenía una condena privativa de libertad pero que no conllevó un ingreso a prisión.

"Desde el propio mes de febrero de 2019 no se había producido ningún tipo de incidencia. Ella no había remitido cualquier situación de temor, no había existido contacto con el agresor o cualquier tipo de incidencia que pudiera hacer prever o evaluar que existía un riesgo. Estaba ya evaluado, tenía un seguimiento mensual, el grupo Artemis además la acompañaba en todo aquello que precisaba, ya sea en tramitaciones de tipo municipal o también la asistencia en unas comparecencias que tuvo que hacer en los juzgados. Por lo tanto, se había hecho un seguimiento, se le había aportado asistencia, acompañamiento, evaluación. La última había sido emitida con fecha 1 de octubre por el Ayuntamiento. Este mismo mes tenía citas concertadas con el Centre Dona. Por lo tanto, estaba todo en marcha, en funcionamiento y no nos hacía prever ningún tipo de riesgo", ha declarado Scotto, a lo que ha añadido que esperan en breve poder realizar la convocatoria de la Comisión de Seguimiento de Violencia de Género junto con Subdelegación de Gobierno para evaluar con mayor detenimiento la información que adelantamos el día de hoy y poder revisar todos los protocolos.

A pesar de que, según el concejal, ya tuvo una condena previa a febrero por quebrantamiento de la orden de alejamiento, la víctima había vuelto a vivir con relativa normalidad y sin noticias de su agresor. "Estaba en una fase de recuperación. Estaba asistiendo a unas clases de formación para adultos y había retomado su vida. No se había detectado ninguna situación de riesgo ni ella la había transmitido, ni tampoco con el botón de ayuda a las víctimas", subraya Scotto.

1 Comentario
  1. Leon dice:

    El sistema educativo progresista que menosprecia el respeto a las personas en general y a los docentes en particular es, ha sido y será la causa de esta lacra de la sociedad
    Recuperar los valores perdidos se me antoja como algo muy difícil si la educación , origen básico del problema, no sufre un cambio radical
    Manifestaciones, teléfonos de ayuda ….etc sólo sirven para camuflar el problema y no para resolverlo


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