Seis meses después de que la UNESCO otorgara a Dénia el reconocimiento de Ciudad Creativa de la Gastronomía, el proyecto Dénia & Marina Alta. Tasting Life sigue creciendo. Y lo hace con la vinculación de la comarca, uniendo productos autóctonos que enriquecen aún más la propuesta gastronómica de la Marina Alta.
La última adhesión ha sido la del BioMoscatell de Poble Nou de Benitatxell, una fuerte apuesta del ayuntamiento poblero consistente en el vino Moraig y zumo de moscatel en conversión ecológica, dos productos que se ajustan a las características del proyecto gastronómico dianense.
El proyecto BioMoscatell nació en 2012, basado en esta tradición e identidad cultural ligada a la uva moscatell. La iniciativa surgió para poner en valor el producto autóctono, dotarlo de la máxima excelencia y no sólo con criterios de sostenibilidad ambiental, sino también por el respeto a la calidad gastronómica y para conseguir las máximas garantías para la salud de su consumidor.
La semana pasada, el alcalde de Dénia, Vicent Grimalt, y el alcade de Poble Nou, Josep Femenía, mantuvieron una reunión para integrar el proyecto BioMoscatell en el sistema agroalimentario comarcal que es la clave del proyecto Denia & Marina Alta. Tasting Life. Para Grimalt, el Biomoscatell puede convertirse en uno de los pilares de este proyecto dado que su filosofía de cultivo sostenible y ecológico entronca con los principios de la Unesco y la Red de Ciudades Creativas.
Desde Poble Nou de Benitatxell han mostrado todo su apoyo al proyecto, que según el alcalde "avanza en un modelo de economía colaborativa, creativa y local y que concentra una oferta gastronómica de calidad relacionada con los recursos locales". Para su concejal de agricultura, Manolo Segarra, "el proyecto Biomoscatell irá de la mano en este bonito sueño comarcal de preservar el legado de nuestros abuelos en el bancalet, en el mar y en la cocina y hacer de la comarca un territorio de alimentación mediterránea, tradicional e innovadora".
